Zinacantepec, México, 19 de julio de 2010.- A través del Programa de Sanidad Forestal, brigadas forestales de la Protectora de Bosques del Estado de México (Probosque), realizaron el saneamiento del arbolado en el ejido San Juan de las Huertas mediante podas de las ramas afectadas por plantas parásitas de muérdago, informó Arturo Beltrán Retis, director de Restauración y Fomento Forestal.
Sostuvo que en los parajes El Albergue y Los Arenales, ubicadas en las faldas del Nevado de Toluca, se hizo una limpia de muérdago en una superficie de 12.3 hectáreas, ya que el muérdago es una planta parásita que se pega a la corteza y ramas de todo el sujeto forestal y es necesario eliminarlo porque se aprovecha del agua y sales minerales de los árboles donde se hospeda.
Explicó que el muérdago (Viscum album) es una planta parásita de hojas persistentes quecrece sobre las ramas de muchos árboles, especialmente en las de pino y encino. “Las hojas son ricas en clorofila, las flores pequeñas y amarillentas, y el fruto es una baya blanca con una sola semilla. Algunos pájaros, como los tordos, se alimentan de ellas y con sus excrementos dejan las semillas sobre los árboles que visitan, asegurando la diseminación de la especie”, indicó.
Beltrán Retis indicó que la principal consecuencia para los árboles parasitados es la merma de su abastecimiento hídrico y nutricional que es usado por el muérdago, además de que a la postre desarrolla una atrofia progresiva a partir de la zona de implantación de esta planta parasita.
“En suelos pobres poco profundos el efecto del muérdago se manifiesta más rápidamente, porque el árbol no dispone del aporte extra que necesitaría para mantener a esta planta parasitaria. En periodos de sequía prolongadas los árboles que sufren mayor grado de infestación pueden incluso morir”, explicó.
Finalmente, Beltrán Retis comentó que estas actividades permitirán un mejor desarrollo y resistencia del arbolado a plagas y enfermedades, como se ha observado en las áreas que fueron saneadas en 2009.