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José Luis Rojas.
En menos de doce horas, se realizó el hallazgo de dos hombres ejecutados en la zona metropolitana del estado, el primero a las 7.00 horas, en el municipio de Temixco, cuyo cadáver fue tirado a un costado de la autopista México-Cuernavaca, a la altura del fraccionamiento Burgos, y posteriormente fue identificado por sus antecedentes penales en el estado de Michoacán como Ramiro López Mendoza .
El segundo caso se registró a las 17.00 horas, cuando otro cuerpo fue encontrado en la carretera federal Cuernavaca-Buena Vista del Monte, a la altura del paraje “ La Carpa ”. De forma coincidente, ambos cuerpos estaban maniatados y tenían el rostro cubierto con plástico y cinta canela, pero además , fueron estrangulados con una cuerda a manera de “torniquete, por lo que murieron asfixiados.
En el primer caso , se trata del cadáver de un hombre al que se calcula una edad de entre 40 y 45 años de edad, quien vestía ropa fina, y fue encontrado con evidentes muestras de haber sido ejecutado y embolsado, pero fue encontrado alrededor de las 7.00 horas, en el kilómetro 90 + 100 de la autopista México Cuernavaca, a la altura del fraccionamiento Burgos Bugambilias.
De acuerdo a los primeros peritajes, y tras el levantamiento del cadáver, se descubrió que la víctima fue maniatada por sus verdugos, mismos que le metieron una bola de trapo en la boca, para después colocarle una bolsa de plástico en la cabeza y enredarle cinta canela en la misma; pero además, al cadáver le fue encontrada una cuerda atada al cuello , con la que se presume fue estrangulado, pues sus verdugos, la utilizaron a manera de “torniquete” hasta acabar con la vida de quien se afirma , llevó en vida el nombre de Ramiro López, luego de que el sistema Nacional de Seguridad Pública , al ser consultado, arrojó que a esta persona pertenecían las huellas de sus manos, luego de que fuera fichado en el penal de Michoacán por el delito de robo calificado .
El segundo caso se registró alrededor de las 17.00 horas, cuando vecinos del lugar reportaron de manera anónima, el hallazgo de un cadáver tirado a la orilla de la carretera, por lo que quedó atorado entre las ramas y arbustos al no caer al fondo de un barranco, y fue necesaria la intervención de los bomberos para rescatar el cuerpo.
Se trata de un adolescente de entre 15 y 17 años de edad, que por igual fue maniatado, y tenía un calcetín metido en la boca, la cabeza cubierta con una bolsa de plástico y pegada a la cabeza con cinta canela; sus verdugos por igual lo estrangularon con una cuerda a manera de “torniquete” en el cuello , pero además, le bajaron el pantalón y el bóxer hasta las rodillas.
El cuerpo de esta víctima ya presentaba los primeros signos de descomposición , por lo que se estima que por lo menos tenía dos días de haber sido asesinado , presentaba además huellas de una salvaje golpiza, tanto , que el rostro lo tenía desecho, lográndose además descubrir que este tenía un “piercing” o anillo de acero en la lengua.
La víctima vestía playera azul, pantalón negro, boxers rojo s, tenis blanco con negro , era de complexión robusta, estatura media, de cabello corto, y al igual que la anterior víctima, fue llevado a las instalaciones del Servicio Médico Forense de la PGJ , en calidad de desconocido, c onfirmándose posteriormente que la causa de la muerte de las dos víctimas fue estrangulación mecánica armada.
En esta forma se inicia el mes de agosto, en materia de inseguridad, pues tan solo en los tres primeros días ya se tienen registradas seis muertes violentas, como son las de los tres agentes federales ejecutados en Xochitepec, cuyos nombres son Omar Muñoz Lazcano, Samuel Alejandro Sánchez López y Pedro Mario López Soriano, la del taxista, Joel Sotelo Chávez de Amatitlán, que fue sacado de su domicilio y sacrificado en el libramiento de Cuernavaca a la altura de la avenida Vicente Guerrero; la anciana de 77 años de edad, María Salgado Mazón, que ayer por la tarde fue asesinada de un balazo en la cabeza a las puertas de su casa; el ejecutado de ayer por la mañana, cuyo cadáver fue encontrado en la autopista México-Acapulco a la altura del fraccionamiento Burgos, y el que fue encontrado por la tarde, y cuyo cadáver fue tirado en la carretera federal, Cuernavaca-Buena Vista del Monte.
