La Maldita Vecindad irrumpe en la escena musical con una mezcla de ritmos como el mambo, chachachá, bolero, danzón, ska, punk y música tradicional en donde solo unos cuantos se habían atrevido ha experimentar en estos ritmos con el rock.
Con su primer disco llamado simplemente, «Maldita Vecindad y los hijos del 5º patio» cuyo contenido era de canciones ya memorables como Morenaza y mujer; el grupo empieza a darse a concoer sin imaginarse que se convertirían en Clásicos del Rock mexicano.