Bernardín García
Vísperas para las fiestas decembrinas, los 500 diputados federales se alistan para recibir mañana viernes en sus cuentas, 140 mil 504 pesos netos, correspondientes a 40 días de Aguinaldo. Aunque cada uno de ellos obtendrá un total de 405 mil 45 pesos por concepto de dieta, apoyos legislativos y lo que ya comentaba el Aguinaldo. Significando un total de 200 millones de pesos en regalos para los congresistas.
El regalo navideño no termina aquí, pues los parlamentarios sumaran a sus cuentas 45 mil 522 pesos de devolución de impuestos del fondo de ahorro, que no se cubrió durante el período del año 2009.
Los anteriores pagos se suman a lo que normalmente reciben los diputados el día 10 de cada mes por un total de 150 mil 351 pesos, los cuales se dividen para la dieta 75 mil 793 pesos; 45 mil 786, de asistencia legislativa, y 28 mil 772 pesos de atención ciudadana.
Todavía los legisladores, tendrán un pago extra por 69 mil pesos para estos dos últimos rubros, mismos que son ingresos directos, por lo que no pagaran impuestos y no se exige comprobación de gasto.
“La mayoría de los habitantes de este país reciben apenas el salario mínimo; me parece bastante mediocre esta actitud de estos funcionarios que a pesar ver como está la situación en el país, todavía reciban estas grandes cantidades de dinero”, opinó Diego Guadarrama. “Esta mal porque hay muchas necesidades en el país, como para que les estén dando esas cantidades estratosféricas en aguinaldos. ¿Cuántas familias se podrían mantener de eso?; con lo que ganan se cambiaría todo el alumbrado público de Cuajimalpa”, detalló Humberto Ramírez. “Mejor que me den a mi el aguinaldo, me falta más a mí que a ellos además ellos ya se robaron mucho durante el año, ¿no?, concluyó Gabriela Torres mostrando su disgusto compartido de los capitalinos para Zona Centro.
Sin embargo, mientras los parlamentarios tienen pendiente su trabajo, como la aprobación de los tres nuevos consejeros del Instituto Federal Electoral (IFE), ya que desde hace un mes siguen vacantes.
Tampoco han podido definir la reforma constitucional en materia de derechos humanos y la de seguridad nacional, con la que buscan regular la actuación del Ejército mexicano en contra el narcotráfico.