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Hoy entró en vigor la Ley de Ayuda Alimentaria para los Trabajadores, luego de ser publicada en el Diario Oficial de la Federación, la cual tiene como propósito promover y mejorar el estado nutricional de los trabajadores, así como prevenir enfermedades vinculadas con una alimentación deficiente y proteger la salud en el ámbito ocupacional; mientras que a las empresas o patrones que otorguen este beneficio, obtendrán incentivos fiscales.
Dicha ley entiende como trabajador a los hombres y mujeres que presentan un trabajo personal subordinado, donde sus relaciones laborales se encuentren comprendidas al artículo 123 de la Constitución; así mismo, el documento manifiesta que los patrones podrán optar de manera voluntaria o concertada por otorgar a sus trabajadores ayuda alimentaria, cuando ese beneficio quede asentado en un contrato colectivo de trabajo.
Ahora bien, las modalidades de ayuda alimentaria por parte del patrón son a través de comedores, restaurantes u otros establecimientos de consumo de alimentos administrados directamente por el patrón o terceros mediante el uso de vales impresos o electrónicos. Asimismo, podrán entregar despensas con canastillas de alimentos o vales de despensa en formato impreso o electrónico; sin embargo, la Ley de Ayuda Alimentaria prohíbe que se compre alcohol y tabaco con ese tipo de apoyos.
En tanto, aquellas empresas o patrones que dispongan de dicho beneficio serán deducibles en términos de las leyes de los Impuestos Sobre la Renta (ISR) y Empresarial a Tasa Única (IETU).
En caso de que los negocios incumplan con las disposiciones, se consideran sanciones de hasta 12 mil salarios mínimos generales para los patrones,es decir, más de 680 mil pesos. Ante esto, emisores de vales y la Canaco urgieron a las autoridades a publicar un reglamento que defina los alcances de la ley para su correcta aplicación.
Ante tal disposición, los trabajadores capitalinos le dieron el visto bueno, pues declararon que «está bien porque muchos de nosotros tenemos la necesidad, no tenemos suficiente dinero para comprar la despensa para comer». «Yo lo veo perfecto, creo que es una ayuda para la gente que de verdad lo necesitamos».
