El cadáver de un hombre, al que se calcula una edad de entre 30 y 35 años de edad, maniatado y con el rostro totalmente cubierto de cinta canela, fue encontrado hoy por la mañana dentro de un arroyo, entre los límites de los municipios de Cuernavaca y Jiutepec, a un costado del ex recinto ferial del Ejido de Acapantzingo.
El cuerpo de la víctima vestía pantalón de mezclilla, playera azul marino, calcetines color gris y cinturón negro y a simple vista no se le apreciaban orificios por impacto de arma de fuego, pero si huellas de golpes y tortura. Los pies los tenía atados con una venda y las manos de la misma forma pero atadas atrás de la cabeza.
De acuerdo a los informes de la policía fue a las 8:25 horas cuando una llamada anónima los alerto sobre el hallazgo del cadáver al final de la calle Begonias, exactamente frente a la botanera “Los Bules”, el cuerpo apenas si se alcanzaba a ver, por lo angosto del canal y las hierbas en el mismo.
Los peritos del Servicio Médico Forense realizaron el levantamiento del cuerpo e inciaron sus investigaciones para aportar el mayor número de características que puedan ayudar a su identificación, ya que hasta el momento el cadáver permanece en sus instalaciones en calidad de desconocido.