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Mientras que la diputada local y vecina de Jojutla, Hortensia Figueroa Peralta, pidió al alcalde Enrique Retiguín asumir su responsabilidad ante la asignación de Gualberto Hernández como director de Seguridad Pública, y que ahora se encuentra desaparecido por haber sido vinculado al crimen organizado, los ex alcaldes de Jojutla Nelson Torres Mondragón de extracción priísta y Alberto Cabrera Díaz, de extracción perredista, se deslindaron de las declaraciones que realizó Retiguín Morales, al responsabilizarlos de haberle heredado a Gualberto Hernández como el director de Seguridad Pública.
Al respecto, Torres Mondragón, actual secretario de turismo en el ayuntamiento de Cuernavaca, manifestó que el citado ex servidor público, era un elemento más del área de Seguridad Pública y lamentó las declaraciones tan ligeras y fuera de proporción del actual presidente de Jojutla, exhortándolo a que asuma su responsabilidad, recordando que es su facultad ratificar y poner en el cargo a quien esté en la titularidad de esa área.
Por su parte, en el caso de la administración pasada que encabezó el perredista Alberto Cabrera Díaz, donde Gualberto Hernández fue su escolta y al final, lo nombró encargado de seguridad pública, sin embargo, el ex edil, también se deslindó de haber recomendado a Hernández Abarca con Enrique Retiguín y que en todo caso, el actual presidente es el responsable de mantenerlo en el cargo, sin embargo, evadió contestar si él sabía los antecedentes de Gualberto Hernández e incluso negó que haya sido su escolta.
Lo que es un hecho contundente, como lo manifestó la diputada local, es que el actual presidente municipal debió hacer una revisión de la persona que designó en el este importante cargo, pese a haber tenido sugerencias, como en su momento las tuvo el gobernador Marco Adame, para ratificar al propio Luis Ángel Cabeza de Vaca, y el día de hoy los hechos han hablado.
