La similitud entre la ciencia y el arte se encuentra en la capacidad de asombro que generan en la vida cotidiana, pues cuando la poesía salta de las páginas de un libro a la vida cotidiana, se viven momentos de exactitud y podemos darnos cuenta de que en la naturaleza también respira la belleza de la poesía y forma una unidad entre lo interior y lo exterior, consideró José Gordon, al presenta La oveja eléctrica durante el primer día de Festival de Nuevos Públicos, que organiza la Secretaría de Cultura en el Museo de la Ciudad de México.
José Gordón, Kelly Haro y Manuel López Michelone La Morsa, charlaron sobre la belleza inigualable y las coincidencias existentes entre la poesía y la ciencia. Explicaron ante estos nuevos públicos —donde lo mismo se encontraban jóvenes de diversas tribus urbanas que avezados lectores— que la belleza en lo simétrico y exacto que existe tanto en la poesía como en la ciencia, es algo de lo mucho que ambas comparten, si se ven en el plano de la vida cotidiana y se quita un poco de solemnidad a la ciencia.
Kelly Haro leyó Hai-Ku de Mario Benedetti e hizo un ejercicio científico con hielo seco, agua y jabón de trastes, para generar espuma y humo, con el fin de demostrar que la ciencia también es muy divertida y forma parte de nuestra vida cotidiana, se integra a la cultura popular y la hace del dominio público.
Previo a esta charla científica, los poetas Norma Bazúa, Enrique González Rojo y Max Rojas compartieron en una mesa sus experiencias creativas, hicieron lecturas y dieron a conocer sus preferencias literarias. El artista plástico, Gabriel Cruz, les entregó un retrato de cada uno de ellos.
Durante esta primera jornada, la Compañía de Gothic Belly dance Saliva y telaraña, con dos bailarinas en el escenario, hicieron un homenaje a escritores fallecidos durante 2010, como Alí Chumacero y Carlos Montemayor, con ritmos lentos y obscuros. Mientras que los integrantes del grupo Morbosos y Perversos, dramatizaron poemas de su autoría, con la actriz Betania Sotelo Vázquez, que lució su cuerpo con un soberbio Body Paint, para manifestarse en contra del sometimiento y la violencia contra la mujer, con lo cual demostraron que es posible enfrentar el problema a través del arte y la cultura.
También se presentó una Herejía Existencial de música novohispana con piezas basadas en la obra de Sor Juana Inés de la Cruz a cargo de la soprano, Ana de Alva. Y al final de la jornada el grupo de romanticismo gótico Black Aggi, planteó una Muerte sin Fin de José Gorostiza, dramatizada por la actriz Betania Sotelo Vázquez.
La directora del Museo de la Ciudad de México, Cristina Faesler, y la coordinadora del Programa de Fomento a la Lectura, Dení Sobrevilla, agradecieron la participación de escritores y demás artistas durante esta jornada cultural y entregaron libros, agendas y catálogos de exposiciones del Museo, como agradecimiento.
Cabe destacar que este domingo, a partir de las 16:00 horas, se contará con la participación del rockero Armando Vega Gil, en el Festival de Nuevos Públicos.