Presuntos sicarios de bandas rivales del crimen organizado, que operan en el municipio de Yautepec, se habrían enfrentado a balazos la tarde de ayer, poco después de las 14.30 horas en la carretera local San Carlos-Oacalco, quedando únicamente como evidencia de su feroz confrontación dos vehículos abandonados, con impactos de bala y manchas de sangre y pedazos de una camisa.
Dicha balacera se registró a la altura del kilómetro cinco de la citada carretera y ahí fueron encontrados un vehículo Mazda color rojo con placas HEV-6307 del estado de Guerrero en cuyo interior se encontraron algunos casquillos de balas calibre nueve milímetros, manchas de sangre y pedazos de una prenda de vestir.
Muy cerca de este automóvil por igual quedó una camioneta Ford Edge color blanca perla, placas MKG-1446 del estado de México con ocho impactos de bala y por igual casquillos de balas percutidas en su interior, además de que a lo largo de la carretera por igual se encontraron rastros de sangre y otros casquillos de balas percutidas de diferentes calibres.
Cabe destacarse que al auxilio solicitado por vecinos de la zona, no arribaron policías municipales, ya que estos brillaron por su ausencia, sino que mejor llegaron al lugar del enfrentamiento, elementos de la Policía Federal, quienes acordonaron a zona en busca de los delincuentes, pero hasta ayer por la noche se desconocía si habían logrado detener a alguno de los protagonistas de la balacera.
Únicamente trascendió de manera extraoficial, que un joven presumiblemente ajeno a los hechos y que desgraciadamente pasaba por ahí resulto herido, pero esta información no se pudo corroborar, ya que las autoridades municipales se desentendieron del hecho y las federales, actuaron con total hermetismo.