Pacientes oncológicos del Hospital del Niño Morelense (HNM) convivieron con familiares, amigos, médicos, enfermeras, voluntarias y directivos en el marco de la celebración del Día Mundial del Niño con Cáncer, que permitió crear un ambiente de fraternidad, solidaridad y fortaleza entre todos los participantes.
Melquisedec Piedragil Ayala, director del HMN, comentó que la celebración ha sido marcada por organismos internacionales de salud, para recordarle al mundo entero que el cáncer infantil es curable si se detecta a tiempo, de ahí que consideró significativa la efeméride, ya que en la última década se ha logrado incrementar el índice de sobrevida de los pacientes con leucemia, el tipo de cáncer más frecuente en la población infantil.
El médico reveló que los avances de la ciencia médica y las decisiones económicas y de salud de los países que han establecido programas que garanticen el acceso a los niños con cáncer a sus tratamientos respectivos, han logrado revertir la tendencia que hace dos décadas vivíamos, por cada 10 niños con cáncer, 7 morían.
Resaltó que actualmente la tendencia ya no es así, ya que hoy es posible ver que de 10 niños con cáncer, 8 o 9 logran sobrevivir tras un tratamiento de al menos 3 años y una fase de recesión de 5 años más.
“También celebramos la valentía de estos niños que reciben durante tres años una quimioterapia a la semana y muchos de ellos son intervenidos quirúrgicamente; celebramos la fortaleza, el sacrificio y la responsabilidad de los padres de familia que dejan todo por venir a las consultas de sus niños, pasar horas y en ocasiones semanas al lado de una cama, atendiendo a sus hijos”, mencionó el director del HMN.
Dijo que tan sólo en el HNM, se atienden de 40 a 50 casos nuevos de cáncer infantil al año, gracias a la estrategia de detección oportuna que ha implementado el sector salud en la que médicos de los centros de salud han sido capacitados para identificar los signos que pudieran sugerir al médico la valoración por un especialista en la materia.
En este sentido, Edgar Ortíz de la O, médico pediatra oncólogo adscrito al Hospital del Niño Morelense, destacó la importancia de que los niños, aun estando sanos, sean valorados una vez al año por su pediatra a fin de que el profesional pueda identificar algún signo de riesgo a tiempo y pueda ser referido a un subespecialista, de esta manera el paciente tiene mayores probabilidades de sobrevida a un tratamiento.
“Hoy la palabra cáncer en los niños no significa necesariamente muerte. El cáncer en los niños es una enfermedad grave pero que si se detecta a tiempo se puede salvar la vida del menor”, finalizó el médico pediatra.