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Gilberto Morales Pedraza, quien escenificara a Jesús en la edición 168 de la Representación de Cristo en Iztapalapa ha dicho que para el significa un gran orgullo tomar el papel del hijo de Dios.
“Señor, usted es el que va a representar el papel de Jesús de Nazaret en esta ocasión, en esta edición 168. Represéntelo con mucha responsabilidad, con mucho respeto, con mucha fe y con mucho amor. Yo creo que esas palabras te dicen todo, te dicen cuanta responsabilidad tienes a tus espaldas y ves hacia a tras y dices creo que tengo todo. Es algo muy emocionante de mi parte, me da mucho gusto, siento un gran orgullo por mí mismo, por mi familia, por esa fe tan grande que tengo a Dios”, describió Gilberto cuando recibió la noticia y su sentir por representar a Jesús.
Morales Pedraza es un joven de 20 años, estudiante de psicología quien fue seleccionado por el comité organizador de entre 20 jóvenes que aspiraban al papel de Jesús, tras reunir requisitos como ser nativo de la delegación, medir como mínimo 1.75 metros de estatura, no poseer tatuajes, perforaciones, novia, esposa ni hijos.
Para esta representación Gilberto se ha preparado a lo largo de dos meses, tanto espiritualmente, emocionalmente y físicamente, pues ha de cargar una cruz que pesa 95 kilos y mide 4 metros de ancho y recorrerá 2 kilómetros en el vía crucis.
“Recorro de 5 a 6 kilómetros, cargo un madero en forma de cruz que pesa aproximadamente de 65 a 70 kilos, con él recorro de 2 a 3 kilómetros por una trotapista donde hay tierra y esa tierra va haciendo que haga más fuerza. Después cargo un tronco, aproximadamente de 40 a 50 kilos y con él subo por la carretera del Cerro de la Estrella, subo a la punta del cerro 2, 3 veces; posteriormente bajo a lo que sería el gimnasio a fortalecer músculo, brazo, pierna, sobre todo tener esa condición al cien”, detalló Gilberto Morales Pedraza.
Por otro lado, uno de los organizadores de la Representación en Iztapalapa Elizario Domínguez ha comentado en referencia al vestuario que utilizarán los 5 mil actores que muchos están hechos de manera gratuita por tradición, porque cada actor gasta en sus propios consumos. “Solo la hechura de su vestuario, porque la hechura se la hace de manera gratuita un compañero. Es una caracterización profesional porque cada actor gasta el dinero que se le solicita para que pague sus propios gastos”.
También Domínguez ha comentado que hay un aproximado de mil extras, que muchas veces no pueden cuantificar, “gente que se suma al evento que es difícil de cuantificar, va a ver más de 100 caballos, más de 4 mil nazarenos, 4 mil coronas de espinas, 8 kilómetros de recorrido en los barrios por cada uno de los días, 2 kilómetros lo que es propiamente el viacrucis y cerca de 200 horas de ensayo”.
Para el día de hoy, se espera a las 15 horas en la Macroplaza Cuitláhuac un recorrido por los ocho barrios de Iztapalapa, para dar seguimiento a pasajes como el de l famoso beso de Judas, el lavo de pies y la última cena, para que mañana se de el viacrucis en el Cerro de la Estrella, donde se llevará a cabo la crucifixión.
Cabe mencionar que se colocarán 5 megapantallas para que todos los presentes puedan observar, además de que los principales actores traerán micrófonos para que los asistente puedan escucharlos diálogos.
