¡Falla la Justicia Oral! “Por un error técnico”, que se tradujo en “insuficiencia de pruebas”, el Poder Judicial, absolvió a los seis presuntos integrantes de la banda de plagiarios denominada de “La Herradura”, de los cargos de secuestro agravado que pesaban en su contra y en perjuicio de una ciudadana estadounidense.
Ante la gravedad de este hecho la Procuraduría General de Justicia presentará el recurso de casación o apelación para tratar de que se revoque la libertad a los involucrados pues a criterio de esta autoridad, los ahora absueltos por todas las evidencias y señalamientos que hay en su contra son: “Cómplices, coparticipes y en el menor de los casos encubridores”, lo que a toda costa les representa una responsabilidad penal, que el Poder Judicial, está ignorando por “Un error técnico”.
De esta manera este caso enfrenta hoy a la PGJ y al Poder Judicial, pues a decir de la PGJ, en tiempo y forma se solicitó a la Sala de Juicios Orales que conocería del caso el que aceptara “la prueba adelantada”, de la ciudadana estadounidense y su esposo y lo aceptaron, como consta en autos con la solicitud por escrito fechada el 6 de julio del año 2010 a las 18:00 horas.
Sin embargo días después al presentarla la citada sala ya no estaba constituida y no la aceptaron en tiempo y forma, a sabiendas de los que términos jurídicos seguían corriendo, lo que “provocó el error técnico”, y la “insuficiencia de pruebas” que señalan los responsables de la justicia oral, cuando ellos incurrieron en responsabilidad, pues si no estaban constituidos como sala para recibir las pruebas y evidencias contra los imputados debieron de crear y notificar de cualquier otra instancia para que hiciera su trabajo.
En contraste para el Poder Judicial, es la Fiscalía de la PGJ, la que no presentó en los tiempos que marca la ley, las evidencias o testimonios y en este caso la prueba adelantada de la víctima contra los imputados, sin tomar en cuenta que se trataba de una ciudadana estadounidense que cuando fue requerida, a los pocos días de haber sido atacada aún se encontraba en crisis nerviosa, y viajarían a los Estados Unidos a recibir atención médica, como lo asientan en la constancia de fecha 6 de julio, que acepto y presento el Fiscal, pero que el Poder Judicial, ya no le pudo aceptar por la sala responsable no estaba constituida, y ya para cuando la víctima regreso a tratar de dar su declaración ya no le fue aceptada.
De esta manera el día de ayer La Justicia Oral determino dejar en libertar y absueltos por “insuficiencia de pruebas”, del delito de secuestro agravado en perjuicio de la ciudadana estadounidense, a Rogelio Giles de la Cruz, Leonel Mancilla Chávez, José Luis Miranda Boyas, Juan Carlos Terrones Torres, Oscar Romero Baltasar y Lucas Miranda Nájera.
No obstante se resalto que los dos últimos Oscar Romero y Lucas Miranda siguen tras las rejas porque fueron sentenciados a 30 años de prisión por los delitos de secuestro y violación a otra mujer.
Habría que recordar sobre este controversial hecho que los seis imputados fueron detenidos el día dos de julio del año pasado, cuando policías ministeriales, al tratar de recabar más evidencias del secuestro y violación de una joven caminaban por los alrededores de la autopista México-Cuernavaca a la altura de Chamilpa y al pasar por debajo de la carretera en un túnel que se encuentra ahí que esa víctima reconocía como la guarida de quienes días antes la había plagiado y atacado, los agentes descubrieron que había dos sujetos, que tenían a una mujer secuestrada, siendo uno de estos Aurelio García Cortés quien se enfrentó a balazos a los agentes y trato de huir corriendo del lugar, por lo que cayó de una altura considerable y murió.
Al seguir los policías buscando en los alrededores a los otros cómplices de este par, apoyados ya con la información proporcionada por la primer víctima y la mujer estadounidense que acababan de rescatar, descubrieron metros arriba del lugar del enfrentamiento a los cuatro ahora absueltos, quienes trataron de pasar desapercibidos haciendo creer que recolectaban hongos, pero se destacó en su momento que la arena o arcilla que tenían entre sus botas entre otras cosas, los ubicaban en el lugar donde sus cómplices tenían a la mujer norteamericana, no obstante fueron absueltos, “por un error técnico”.