DEJAN EN LIBERTAD A ESCOLTA DEL SECRETARIO DE SEGURIDAD DE CUERNAVACA, MARIO AYÓN

Tras haber dado muerte en forma “accidental”, al menor Carlos Esteva Lazos de 16, años de edad, el escolta del general Mario Ayon Rodríguez, Rubén Domínguez Mejía y de que este se entregara a las autoridades dos días después de los hechos, este domingo en audiencia de Control, la Justicia Oral le impuso como medidas cautelares que puede estar en libertad pero sin salir del estado o del país para que no se sustraiga a la acción de la justicia y el pago de una garantía provisional de 20 mil pesos.
Este domingo también se informó que será en audiencia de Vinculación a Proceso, a celebrarse el próximo 28 de octubre a las trece horas en la septima sala de Justicia Oral donde se determine si se le impone prisión preventiva, alguna garantía económica mayor o si se le permitirá enfrentar el juicio en su contra en libertad o ya tras ls rejas.
Todo ello luego de que el pasado miércoles alrededor de las 22.30 horas, el escolta según su dicho, salió franco de las instalaciones de la Secretaría de Protección y Auxilio Ciudadano y a decir de este abordó un taxi de un conocido, para que lo llevara a su domicilio.
Siendo este taxi uno de los que cubren el derrotero en el norte de la ciudad, es decir hacia Santa María y Huitzilac, mismo que llevaba como copiloto al menor hoy occiso.
A decir del policía tras abordar el taxi, las correas de la mochila que llevaba al hombro, se enredaron en su pistola de cargo-que sobra decir debió dejar en el deposito de la SP y AC porque estaba franco o de descanso- y al tratar de destrabarlas el arma se disparo e hirió al menor que muy grave fue ingresado a las 22.45 horas en el hospital general de Cuernavaca, donde murió el jueves 20 a las 20.00 horas según el levantamiento registrado por la Procuraduría General de Justicia.
Tras estos hechos que en ningún momento fueron informados oportunamente ni por la Secretaría de Protección y Auxilio Ciudadano de Cuernavaca, ni por la Procuraduría General de Justicia, sólo se conoció de ellos hasta el viernes pasado, el mediodía cuando ya algunos reporteros de Zona Centro cuestionaron sobre el caso a las autoridades municipales y de la PGJ, fue sólo así como ambas instancias emitieron un escueto comunicado en donde lo que se destacaba es que el escolta se presento y se entregó a las autoridades de la PGJ, pero “la madrugada del viernes”, no antes.
Tampoco se informa de manera puntual y detallada y mucho menos se dan a conocer los datos del taxista, y de su vehículo, testigo clave y escenario de los hechos, para corroborar el dicho del escolta, en estas condiciones de opacidad es que hoy se conoce este lamentable hecho, que todo parece indicar, las autoridades involucradas trataron de ocultar o al menos de minimizar.