La cuenta regresiva para que los actuales alcaldes ya comenzó están a punto de soltar la silla pero muchos se van con las manos y bolsillos llenos, con fuertes cuestionamientos sociales, el quebranto financiero de sus alcaldías y cientos de demandas laborales y penales como ejemplo es el caso de Jiutepec donde por cierto el alcalde y los regidores se dieron su aguinaldo.
Alejandro López Bobadilla ayudante municipal de la colonia Lomas del Texcal de Jiutepec y otros ayudantes previo a sostener una reunión con la alcaldesa electa Silvia Salazar Hernández explicó que la calificación para el alcalde que se va Miguel Ángel Rabadán es muy mala porque se fue sin dar la cara a la ciudadanía de varios pendientes que dejó.
Así que ahora los ayudantes dialogan con las autoridades entrantes para sacar del hoyo a Jiutepec y se concluyan las obras que se quedaron pendientes porque de 71 millones de pesos que supuestamente obtuvo el alcalde tampoco se dio un informe que pasó con este dinero.
Luego Miguel Ángel Rabadán antes de irse cobró su aguinaldo junto con su cabildo dejando problemas como la inseguridad y finanzas malversadas, e incluso meses antes se incrementaron los sueldos aunque lo negaron.