A un par de días de iniciado el primer cambio de placas en la actual administración y los conductores estar por primera vez obligados a contratar un seguro de daños a terceros con un costo de $526.71 pesos y así poder tener derecho a concluir el trámite para recibir sus láminas nuevas, en las instalaciones de la Secretaría de Control Vehicular, la desorganización sigue prevaleciendo. La ciudadanía se queja de la falta de orientación y oficio de parte de los funcionarios para agilizar y facilitar el trámite para el cambio de placas, las filas son estáticas y el tiempo de los contribuyentes se alarga de manera indefinida para concluir el proceso.
Otra queja generalizada y muy sentida por parte de la ciudadanía, es el desembolso repentino y obligatorio para pagar las placas cuando los propietarios de vehículos tuvieron que vender algunas cosas o buscar incluso préstamos para poder pagar el dinero extra que exige control vehicular y así lo expresó la ciudadanía en un sondeo realizado por Zona Centro.
El dato es que las aseguradoras se están llevando un festín de clientes forzados, 400 mil vehículos registrados de los cuales un alto porcentaje debe someterse a esta obligación y tal es el nivel de la obligación a consumir un seguro de daños a terceros, que la misma Secretaría de Control Vehicular, les instaló una carpa en donde nueve empresas al más puro estilo de un tianguis dominical, esperan que los inconformes propietarios acudan a desembolsar dinero, que en algunos casos, no tenía a la mano el dueño del automóvil.