El Procurador General de Justicia Rodrígo Dorantes Salgado aceptó que algunos altos funcionarios de la dependencia a su cargo no pasaron los exámenes de control y confianza por lo que tendrán que ser removidos del cargo.
Algunos de sus más cercanos colaboradores que había propuesto el fiscal no fueron aptos para desempeñar el cargo según lo que ha dado a conocer el Instituto de Evaluación por lo que simplemente no podrán seguir en la procuraduría.
El fiscal morelense se negó a dar nombres de quienes son los que no aprobaron por lo que ahora invitó a otras personas a formar parte de su equipo que también tendrán que ser sometidos a los exámenes de control y confianza.