El ejército estadunidense está preparado para un ataque contra Siria en respuesta al presunto uso de armas químicas por parte del régimen de Bashar al-Assad, informó ayer la cadena CNN citando a fuentes militares, una opción que contemplan tanto las autoridades sirias como la oposición en el exilio.
La emisora NBC, entretanto, adelantó que el ataque norteamericano con misiles contra Siria podría comenzar tan pronto como mañana. Sin embargo, el presidente Barack Obama no ha tomado aún ninguna decisión.
Más tarde, NBC dijo que Estados Unidos podría atacar Siria el martes de la próxima semana.
El secretario de Defensa estadunidense, Chuck Hagel, dijo a la televisión británica BBC que el ejército está listo para lanzar un ataque si llega esa orden del Presidente. “Hemos posicionado nuestros activos para ser capaces de cumplir cualquier opción por la que el Presidente desee optar”, dijo Hagel.
El jefe del Pentágono, que se encuentra de viaje por el sureste de Asia, informó que presentó al Presidente “todas las opciones para todas las contingencias”. “Él las ha visto (…). Estamos preparados y dispuestos”, añadió.
Según el Departamento de Defensa, a lo largo de la jornada Hagel además habló con sus pares de Reino Unido, Phillip Hammond, y Francia, Jean-Yves Le Drian.
La oposición siria en el exilio sostuvo que está informada de una inminente intervención militar contra Siria.
Nos han comunicado que las grandes potencias preparan un ataque para castigar al régimen, pero no tenemos informaciones concretas sobre objetivos de los ataques”, dijo en Beirut Munser Machus, un miembro de la Coalición Nacional Siria.
El gobierno estadunidense quiere presentar pronto pruebas de que el régimen de Al-Assad está detrás de los ataques con gas de la semana pasada en los que murieron 1,300 personas, según la oposición.
El ataque se llevaría a cabo con misiles de crucero o bombarderos de largo alcance disparados desde buques de guerra y estaría dirigido contra objetivos militares no relacionados directamente con el programa de armas químicas del país.
El momento del ataque dependería de tres factores: que se completen las informaciones de los servicios secretos sobre la implicación de la cúpula siria en el supuesto ataque con gas venenoso de la semana pasada, las deliberaciones con los aliados y el Congreso y el análisis del marco legal internacional.
Los expertos creen que para la intervención militar se esperaría quizá a la salida del país de los expertos en armas químicas de la ONU.
Según informó el diario conservador ateniense Kathimereini, citando a círculos del Ministerio de Exteriores y de Defensa, Estados Unidos solicitó el uso de dos bases militares en el sur de Grecia y en Creta, en vista de una posible intervención en Siria.
El gobierno griego, entretanto, rechazó comentar las informaciones.
Por otro lado, las fuerzas de combate británicas están preparando planes de emergencia para una intervención militar, informó el gobierno británico. El primer ministro, David Cameron, encabezará hoy una sesión del Consejo de Seguridad Nacional en Londres, en la que también participarán militares.
El presidente François Hollande dijo que “Francia está dispuesta a castigar a quienes tomaron la decisión atroz de atacar con gas a inocentes” en Siria la semana pasada.
Régimen desafiante
El régimen sirio desafió ayer a los países occidentales a demostrar que su ejército ha utilizado armas químicas contra la población y aseguró que, ante los “tambores de guerra”, Siria está preparada para defenderse de un ataque.
El ministro sirio de Exteriores, Walid al Mualem, atribuyó a las “divergencias entre rebeldes” la suspensión de la visita que la misión de expertos de la ONU tenía previsto hacer al área de Ghouta Oriental, junto a Damasco, para determinar si se usó armamento prohibido.
El jefe de la diplomacia siria consideró que una intervención militar extranjera no debilitará las capacidades militares de su país en su “guerra contra el terrorismo”, y agregó que el régimen se defenderá con “todos los medios disponibles”.
Tras reconocer que “todos estamos escuchando los tambores de guerra en torno a Siria”, Al Mualem criticó con dureza a Estados Unidos y a Reino Unido, a quienes acusó de propalar informaciones falsas y de querer chantajear a los aliados del régimen de Bashar al-Assad.
“Primero, cualquier acción militar en esta región tiene el objetivo de servir a Israel, y, en segundo lugar, ayudará a los propósitos militares del Frente al Nusra, vinculado con la red terrorista de Al-Qaeda”, aseveró.