El crecimiento y fortalecimiento de las autodefensas en Michoacán es muestra de la incapacidad de las autoridades de brindar seguridad a la población que está bajo el dominio de la delincuencia organizada, así lo dijo el presidente de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), Raúl Plascencia Villanueva.
Sin embargo, debe impedirse su expansión y los tres niveles de gobierno deben buscar soluciones que garanticen la paz social ya que las autodefensas también pueden convertirse en un riesgo, aseguró Raúl Plascencia Villanueva.
«Es un asunto que tiene que atenderse con la debida oportunidad lamentablemente lo he señalado, que no hay justificación para que las autodefensas estén llevando a cabo actividades que corresponden a la autoridad pero también que no hay justificación alguna para que grupos de personas decidan armarse y tomar la justicia por propia mano”, aseguró.
El ombudsman nacional dijo que para poder evitar que siga reproduciéndose esto es importante que las autoridades que tienen a su cargo la función de la seguridad pública asuman su responsabilidad para restablecer los controles respectivos y permitan garantizar a la sociedad mayor tranquilidad y mayor seguridad.
Por su parte el Procurador General de la República, Jesús Murillo Karam, aseguró que poco a poco se ha venido recuperando la seguridad en Michoacán y que no existe la posibilidad de que se sigan expandiendo.
«Una parte del territorio de Michoacán en la que había violaciones permanentes incluso hasta el derecho de paso hoy se puede circular. Quedan varias cosas que resolver entre otras la plenitud de la seguridad que eliminará los pretextos o las razones de quienes dicen estar buscando la ley y la justicia. -Pueden seguirse extendiéndose?- No van a extenderse eso lo aseguro», dijo.