Un grupo de científicos de la Universidad de Florida (EE.UU.) ha identificado el meteorito marciano más antiguo hallado hasta la fecha, que dataría de más de 1.700 millones de años. La roca, de apenas seis centímetros de diámetro, habría vagado por el espacio durante este tiempo hasta finalmente impactar en nuestro planeta el pasado año en el desierto del Sahara.
La roca ígnea NWA 7533 es el primero de cinco fragmentos que se atribuyen al mismo meteorito, fragmentado al entrar en la atmósfera. El análisis geológico ha revelado que se trata de una brecha regolítica, es decir, un material formado por la compactación de distintos minerales a lo largo del tiempo. La presencia de piroxenos, característicos de las rocas basálticas analizadas en la superficie marciana, y de zircón, un mineral de gran antigüedad, revelan que procede de la corteza primigenia del planeta, formada hace aproximadamente 4.000 millones de años.
La cifra de meteoritos marcianos identificados oscila entre 60 y 100, aunque según los científicos, el número de fragmentos rocosos que aterrizan en nuestro planeta es mucho mayor. Sin embargo, la mayor parte de ellos nunca llega a descubrirse debido a la dificultad para localizarlos en zonas oceánicas (que suponen dos tercias partes de la superficie terrestre) y la dificultad de adquirirlos ante la compraventa de meteoritos en las zonas desérticas.
El hallazgo arrojará información valiosa sobre el proceso de formación de la corteza marciana, y por ende, sobre la formación de la corteza de la Tierra y la Luna, puesto que todas ellas se originaron en el mismo periodo.