Durante las vacaciones de fin de año miles de turistas y ciudadanos de Morelos se quejaron por las obras que realiza la empresa Infratec u Obras Especializadas de Infraestructura en el Distribuidor Vial Palmira o mejor conocido como el “Polvorín” sobre el libramiento México-Cuernavaca pues por más de cinco kilómetros se forman columnas de autos que pierden tiempo, dinero y sobre todo la paciencia al manejar por esta zona conflictiva.
Desde los paseantes que fueron hacia el estado de Guerrero hasta los que se quedaron en la zona de balnearios de Morelos pudieron percatarse de que la obra sigue sin avanzar a pesar de que las autoridades como el subsecretario de infraestructura de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes Raúl Murrieta vino a Morelos hace un par de meses a anunciar que la obra quedaría lista a el primer trimestre del 2014.
Pero la obra está plagada de errores técnicos y sobre todo se teje una historia de presunta corrupción porque el distribuidor que conectará los municipios de Emiliano Zapata y Temixco con la autopista del sol está pagada casi en su totalidad por el orden de los 300 millones de pesos pero la obra iniciada en marzo de 2012 por el ex gobernador Marco Antonio Adame Castillo lleva un atraso de casi dos años.
Ingenieros y arquitectos señalaron para Zona Centro Noticias que la autoridad deberá iniciar la revisión de lo que se ha hecho hasta el momento, a simple vista presenta fallas técnicas como trazos mal hechos y aunque el gobernador del estado había pedido desde hace meses a la Secretaría de Comunicaciones y Transportes procediera de manera legal contra la empresa por el incumplimiento de la obra, esto nunca sucedió por lo que quizá hay una protección de las autoridades a los socios y propietarios de la empresa.
Por lo pronto miles de automovilistas se han visto afectados en esta temporada vacaciones sobre todo porque se incrementó el número de vehículos y en primer plano los accidentes que ha dejado varios lesionados y perdidas materiales porque los señalamientos están mal colocados y las obras son abandonadas durante días enteros sin que nadie se haga responsable de su cumplimiento, comenzado por el delegado de la SCT el guerrense Carlos Mateo Aguirre Rivero hermano del gobernador de aquella entidad quien solo se le ve por algunos días en sus oficinas.