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Con ochenta mil pesos como pago por “la reparación del daño”, y graves corruptelas y complicidades con paramédicos, un médico y personal de la Procuraduría General de Justicia hoy Fiscalía General, el Síndico del Municipio de Tlalnepantla, Cristóbal Trejo Espíndola, libró de la cárcel a su sobrino Ángel Rojas Trejo, quien la noche del 18 de noviembre al volante de una camioneta Ford color roja de tres toneladas placas NW-45-630 del estado, atropelló y mató a su paisano Víctor Manuel Garfías Saavedra.
Esa noche de acuerdo a los familiares de la víctima, Ángel Rojas, atropelló en pleno centro de la cabecera municipal, frente a una tienda a Víctor Manuel, destrozándole la caja torácica, dejándolo gravemente herido y al verlo así pidió ayuda a su primo el Síndico Cristóbal, quien mando traer a los paramédicos del municipio, quienes tras valorar al herido y darse cuenta de su gravedad, les fue ordenado que no dijeran nada que lo llevaran a su domicilio y que indicaran a sus familiares que no tenía nada que estaba borracho y se había caído.
Sin embargo a los pocos minutos la víctima dejó de existir, y ante ello el Síndico Cristobal Trejo, aprovechándose de la condición humilde de los familiares de Víctor Manuel, les dijo que no dieran parte al Ministerio Público, ya que esto les costaría mucho dinero y trámites, además de que no había necesidad de ello, y es más mostrando su humildad les regaló la caja mortuoria y les agilizo los trámites para el entierro.
Pero vecinos del pueblo dijeron a los familiares del hoy occiso como es que este había sido atropellado y al darse cuenta que hasta habían cambiado sus ropas para borrar las evidencias del hecho, exigieron posteriormente la exhumación del cadáver donde se comprobó que había tenido estallamiento de vísceras, porque la camioneta le había destrozado el tórax.
Ante esto afirman los familiares de la víctima, como su hermana Minerva, el Síndico, además de “convencer” al ministerio público, Pablo Ríos que inicialmente conoció del caso para que no investigará nada, por lo que casualmente “se incapacito”, posteriormente compró el testimonio profesional y el certificado de defunción del médico Juan Manuel Vera Montiel, para asegurar que la causa de muerte de la víctima fue un infarto y no las lesiones ocasionadas por el atropellamiento.
El mismo síndico compró la asesoría del Fiscal de Homicidios la PGJ hoy Fiscalía General, Gumersindo Sánchez Lagunas, quien se ocupo para que la carpeta de investigación YAUIDD/3011/2013, nunca se investigaran las evidencias y resultados de la necropsia tras la exhumación, para que no se judicializara la carpeta y no se ejercitara acción penal contra todos los involucrados y por el contrario, para que el funcionario Gumersindo junto con los abogados defensores de Ángel Rojas, presionaran al padre del hoy occiso, un anciano de 80 años de edad, enfermo y con problemas de lucidez mental para que firmara una acuerdo y desistimiento de cualquier acción legal por 80 mil pesos como “reparación del daño” y con eso dieron por cerrado el caso, asegurando que “no hay ningún delito que perseguir”.
Es por ello que los familiares del difunto Víctor Manuel Garfías, exigen al Fiscal General, Rodrigo Dorantes, al gobernador Graco Ramírez y a todas las autoridades que tengan que ver con la procuración de Justicia que se investigue este crimen y se castigue a todos los cómplices del primo del síndico y a este mismo, por toda la serie de corruptelas y tráfico de influencias en que incurrieron para dejar impune este asesinato.
