Empleados del Síndico de Cuernavaca, Fernando Martínez Cué, cansados de sus abusos denunciaron que este además de “rasurarles” sus salarios con cooperaciones para festejos que debiera pagar él con sus recursos, como los decembrinos, sigue traficando con influencias para rentar sus propiedades a diferentes instancias de gobierno.
Dijeron los colaboradores del Síndico, quienes explicaron que no pueden dar a conocer sus nombres por medio a represalias que no es posible que un sujeto tan ambicioso y miserable tenga un cargo público y menos en un Ayuntamiento en donde se enfrenta una severa crisis económica a consecuencia precisamente de la corrupción y la impunidad.
Los empleados de la Sindicatura indicaron que no se explican porque el alcalde Jorge Morales Barud, sigue permitiendo que gente con estas prácticas de deshonestidad haga lo que quiere, pues recordaron que al inicio de la presente administración impuso en la Dirección de Comercialización del SAPAC a Miguel Ángel Díaz Corona para estar haciendo negocios con la autorización de tomas de agua a desarrollos habitaciones y comerciales.
Pero a la fecha como lo ha hecho desde hace años, traficando con influencias con los cargos que ha venido desempeñando, pues tal parece que le gusta incrementar su riqueza por medio del erario público, se dedica a rentar algunas de sus propiedades lo mismo a la Secretaría de Relaciones Exteriores, al Congreso del Estado y la más criticada a la Procuraduría Federal del Consumidor donde cobro el favor de colocar ahí como delegada a su secretaria, haciéndola que le rentara su edificio en la avenida Morelos, lo que es bien sabido.
Es por ello que insistieron los propios empleados del Síndico, al darse cuenta de sus manejos deshonestos y voraces que exigieron que se le investigue y que el alcalde Jorge Morales Barud, no siga solapando este tráfico de influencias y abusos pues hasta a ellos les descuente de sus salarios “las cooperaciones”, para cualquier evento que se organiza en su oficina.