Gran parte de la problemática que padece la ciudadanía con el transporte público, es consecuencia de la corrupción e impunidad que se ha solapado desde de la hoy Secretaría de Movilidad y Transporte, en la que inicialmente David Gómez Basilio ideo la venta de concesiones, argumentando “una regularización”, millonario negocio que posteriormente fue continuado hasta la fecha, por el ex Subsecretario, hoy degradado a director general, Enrique Ramírez Escobedo.
En medio de las protestas de concesionarios, pero sobre todo usuarios del transporte público, se identifica a Enrique Ramírez como “el operador” y benefactor de gran parte de esta “maquinaria de corrupción” que permitió por más de un año a David Gómez y su principal cómplice Israel Camacho, vender más de 4 mil concesiones en la zona conurbada y oriente del estado y ahora por medio de su despacho, litigar, para que estas no sean canceladas, pues se le vendría abajo la ganancia millonaria, que muchos aseguran en gran parte, han ido a parar a las manos de un virtual candidato a la alcaldía de Cuernavaca.
Los ciudadanos y concesionarios recuerdan, que tras la sorpresiva remoción de David Gómez de la SMyT, luego de las imparables quejas y denuncias en su contra donde se exhibieron las incontables muestras de corrupción, lo mismo con la venta de concesiones, que con los permisos, el emplacamiento vehicular y la venta de los seguros para estos, la población creyó que las cosas en esa dependencia iban a cambiar, que se investigaría y castigaría a los responsables del caos en el transporte público pero no fue así.
A la fecha señalan los inconformes, el otrora subsecretario Enrique Ramírez Escobedo, que sin la mínima vergüenza acepto ser degradado a director, con tal de no ser separado de “la ubre de la corrupción”, sigue al frente de este mecanismo en la SMyT, haciendo de las suyas y sin haber sido del equipo de David Gómez, habiendo sido “capacitado” en la obtención de beneficios de toda esa corrupción, por el ex también director Francisco Maldonado Huete, quien finalmente si fue removido del cargo, pese a sus influencias políticas; hoy Ramírez Escobedo permanece administrando esa “mina de oro”, solapando, protegiendo y encubriendo delegados y funcionarios cómplices de David Gómez, a sabiendas de que nada de eso es gratis y que le genera jugosos dividendos.
Muchos de los quejosos se preguntan y donde está el Subsecretario, José Luis Correa, sin saber que inconforme con el lugar, las instalaciones y el haber sido removido de una subsecretaría de gobierno para enviarlo a la Subsecretaría de SMyT, finalmente tomo sus cosas de la oficina que se le había habilitado en el edificio de “Base Zapata” y se fue a un oficina mejor, localizada en el Boulevard Juárez, en donde según se afirma, “está dedicado a trabajos específicos de apoyo, como la nueva Ley de Movilidad y Transporte”.