La desnutrición materna, así como la deficiencia de hierro, ácido fólico o vitamina B-12 en el embarazo y las malas prácticas alimentarias, producen un tipo de anemia a niños desde que se encuentran en el vientre materno hasta cualquier edad.
La anemia es una enfermedad en la que la sangre tiene una disminución de la coloración de los glóbulos rojos; éstos no contienen suficiente hemoglobina, proteína rica en hierro que da a la sangre su color y permite a los glóbulos transportar el oxígeno – es decir energía- a todas las partes del cuerpo.
Así lo indicó Nydia Carol Bailón Franco, pediatra hematóloga y coordinadora del servicio de Hemoto-oncología del Hospital del Niño y el Adolescente Morelense (HNAM), quien explicó: “Cuando disminuyen los glóbulos rojos el menor puede sentirse cansado, decaído, mareado, con sensación de falta de aire y a los niños en edad escolar les cuesta más trabajo aprender.
Agregó que la cantidad de glóbulos rojos que debe tener cada persona depende de la edad y del sexo, indicó la especialista; existen varios tipos de anemia, las más comunes son por deficiencia de hierro, de ácido fólico o vitamina B12, precisó Gabriela González del Paso, coordinadora de Nutrición y Dietología del HNAM.
De acuerdo a la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición de 2012 del Instituto Nacional de Salud Pública el 38 por ciento de los menores de uno a dos años de edad registraron anemia por deficiencia de hierro, el 25.6 por ciento (2 a 3 a tres años de edad), el 17.5 por ciento (de 3 a 4 años) y el 13.7 por ciento los niños de cuatro y cinco años de edad.
La Coordinadora de Nutrición y Dietología del HNAM explicó que las causas más comunes de anemia en los menores de cinco años se presentan por malas prácticas de alimentación, es decir, no incluyeron alimentos ricos en hierro en su dieta y por no desayunar alimentos ricos en azucares simples.
“Otros elementos por los que los niños tienen anemia se debe a que retrasaron la introducción alimentos después de los seis meses de edad o bien le dieron alimentos distintos a la leche antes de los 4 meses de edad, es decir, el menor tuvo malas pautas de alimentación el primer año de vida”, subrayó Gabriela González.
Cuando los niños registran una deficiencia de hierro por mucho tiempo comen tierra, gis o hielo, además de tener palidez, falta de concentración escolar y un crecimiento inadecuado, refirió Bailón Franco.
Otras causas que provocan la anemia están relacionadas con enfermedades crónicas más graves como la diabetes, padecimientos renales o algún tipo de cáncer, por la falta de producción o pérdida de sangre que provocan éstas.
El tercer grupo de anemias pueden ser heredadas en las que existe destrucción de los glóbulos rojos incrementada, por lo tanto el tratamiento es diferente y debe ser atendido por el especialista.
Medidas preventivas
Las especialistas del HNAM recomendaron que la mamá embarazada tenga una alimentación adecuada como consumir verduras, frutas, cereales, tubérculos, leguminosas y productos de origen animal, todos en cantidades suficientes, además de sus chequeos periódicos con el médico.
También es necesario que tomen suplementos de hierro y ácido fólico. Que alimenten con leche materna a libre demanda los primeros seis meses de vida del bebé y en caso de no poder ofrecer leche materna que tome fórmula para lactante fortificada con hierro.
Que los menores que consumen leche materna inicien con un suplemento de hierro a partir de los cuatro meses de edad.
Además también el HNAM recomienda introducir alimentos ricos en hierro a partir de los seis meses de edad como cereales fortificados, vegetales verdes, leguminosas (lentejas, frijol) y carnes de pollo, ternera o pavo.
“Es importante que los padres de familia consulten a su médico porque los alimentos derivados de la leche de vaca o algún otro mamífero disminuyen la absorción del hierro”.
En caso de no ser atendida a tiempo algunas veces la anemia puede ser un síntoma de una enfermedad crónica o grave, advirtió la Coordinadora del servicio de Hemoto-oncología.
De enero a la fecha el Hospital del Niño y el Adolescente Morelense registró 275 consultas por anemia.