Esta mañana el secretario del ayuntamiento Enrique Paredes Sotelo realizó un recorrido de supervisión en la remodelación de la calle Ricardo Linares de Cuernavaca que tendrá que ser concluida mañana 10 de diciembre pero se detectaron algunos “focos rojos” en la construcción como una mala instalación eléctrica.
El funcionario municipal explicó que no liberarán la obra a la empresa constructora hasta que se tengan los peritajes de protección civil, obras públicas y el sistema de agua potable de la capital quienes determinarán si existen fallas que se tendrán que corregir.
El abogado mencionó que esta mañana vecinos tenían problemas con la energía y se sospecha que se debe a una mala instalación de la empresa la cual aunque el compromiso fue realizar el cableado subterráneo tampoco lo hicieron.
Otro de los puntos que se tendrán que considerar es que probablemente se genere un conflicto vial porque la calle quedó reducida a como estaba originalmente y aunque la secretaría de movilidad y transporte tiene la intención de que el transporte colectivo no circule por esta zona los concesionarios señalaron que podrían buscar amparos porque tienen años circulando con los derroteros establecidos y eso ha generado derechos. Pero además de ello en caso de que no se les permita el paso por esta zona otras calles de Cuernavaca podrían verse saturadas como ocurre actualmente sobre las calles Álvaro Obregón, Degollado, Victoria entre otras.
Por lo pronto se anunció que el ayuntamiento ya autorizó que se realice la tradicional verbena popular con comerciantes y la celebración religiosa que cada año se conmemora en el “Chapitel del Calvario” con motivo de la celebración a “La virgen de Guadalupe”.