Pobladores de la colonia Texcala del municipio de Yecapixtla, retuvieron este viernes por la tarde a elementos de la Policía del Mando Único, para tratar de obligarlos a que les entregaran al detenido Antonio Morales Camacho, para lincharlo, porque este había ido a amenazar de muerte a su vecina Juanita Rodríguez Morales.
Por fortuna agentes de la Policía de Investigación Criminal de la Fiscalía Oriente y el comandante Regional del Mando Único lograron convencerlos de liberar a los uniformados y a dejar que el detenido fuera remitido a las autoridades correspondientes. Este viernes alrededor de las 18.00 horas los vecinos del citado poblado de la calle Emiliano Zapata, solicitaron el auxilio de la Policía del Mando Único del lugar, ya que un sujeto había ido a amenazar de muerte a Juanita Rodríguez, porque esta tiene instalado en su domicilio un servicio de perifoneo y desde ahí promociona o publicita a quien la contrata. La agraviada dijo que a la hora señalada llegó hasta su casa Antonio Morales, vecino de la calle Ecuador número 20 del poblado de Huecahuaxco, para decirle que “ya no quería que siguiera voceando nada en su equipo, para nadie y que si lo seguía haciendo la iba a matar”.
Luego de amenazar a la mujer, sujeto se dispuso a huir del lugar en la camioneta en que había llegado, pero esta ya no le arranco y eso dio tiempo a que llegaran los policías y lo capturaran.
Sin embargo los vecinos al enterarse de lo que había ocurrido, acorralaron a los policías, en este caso al comandante Pedro Elías Arellano y dos de sus elementos, así como la patrulla 372 y les exigieron que les entregaran al detenido porque decían: “queremos saber quien es, quien lo mando a amenazar a Juanita y porque, para lincharlos”.
La situación se tornó tensa por espacio de dos horas, ya que los lugareños se negaban a dejar que los policías del Mando Único se retiraran llevándose al detenido, pero finalmente el comandante regional del Mando Único, de apellido Abarca y elementos de la Policía de Investigación Criminal de la Fiscalía de la zona oriente y un fiscal que incluso ya se encontraba “en la fiesta”, tuvo abandonar la algarabía para acudir al lugar del conflicto y así lograron convencer a los lugareños de liberar a los policías y a su detenido, alrededor de las 20.30 horas.
Ya cuando todo estaba resuelto llegó el Comisionado Estatal de Seguridad, Jesús Alberto Capella Ibarra, luego de varios días de “no tener apariciones en público” en medio de un gran despliegue de su “su cuerpo de seguridad”, provocado severo malestar entre los pobladores y las críticas en su contra por sus alardes, luego de que cuando se le necesitaba nunca apareció.