Esta mañana el sacerdote Alejandro Solalinde se reunió en privado con el obispo de Cuernavaca Ramón Castro Castro y la familia del joven Oliver Wenceslao Navarrete Hernández quien fue secuestrado, asesinado en Cuautla y posteriormente enterrado de forma ilegal en fosas de Tetelcingo por la fiscalía de Morelos.
La reunión se realizó en la Diócesis de Cuernavaca donde minutos después acompañado de Javier Sicilia y la familia de Oliver ofrecieron una conferencia de prensa para exigir justicia y condenar el actuar del gobierno del estado que ha tratado de ocultar el hecho de que permanecen más de 100 cuerpos sin identificar enterrados en Tetelcingo.