Aunque el índice de casos de mordedura de la araña violinista en Morelos es muy bajo, pues en 2015 sólo se registró un caso, los Servicios de Salud de Morelos (SSM) exhortan a la población a extremar precauciones.
El encargado de despacho del departamento de Epidemiología de los SSM, César Miguel Eroza Osorio, señaló que el arácnido Loxosceles laeta, mejor conocido como araña violinista mide alrededor de 2.5 centímetros, habita en lugares polvorientos, oscuros y aislados del contacto humano, por lo que invitó a los morelenses realizar constantemente limpieza en lugares de la casa como clósets, bodegas y jardines.
“La araña es de hábitos nocturnos, huye de la luz directa y cuando muerde sus toxinas lastiman y necrosan la piel, el tejido celular subcutáneo, provocando enrojecimiento, formación de ampollas con pus, fiebre alta, dolor de cabeza, náuseas, escalofríos y dolor muscular, principalmente”, detalló.
Eroza Osorio puntualizó que en caso de mordedura, es importante evitar auto medicarse y acudir al hospital más cercano.
“En los hospitales de SSM contamos con los sueros y medicamentos necesarios para tratar la mordedura; en caso de emergencia, invito a la población para que se comunique al Centro Regulador de Urgencias Médicas (CRUM), donde se les brindará apoyo y orientación médica”.
Finalmente, describió que la araña es de color pardo o café, tiene ocho patas y tres ojos, puede medir hasta tres centímetros de largo por 1.5 de ancho y su veneno se expande rápidamente.
“No hay motivo para alarmarnos, no obstante, si nos corresponde tomar medidas como sacudir la ropa y zapatos antes de vestirnos, antes de irse a dormir, no andar descalzos, así como mantener limpio el interior y exterior de la vivienda”, finalizó.