Con todo y el hermetismo impuesto por las autoridades se ha logrado saber que el custodio de la cárcel distrital de Jojutla que resulto herido de un balazo en un pie durante una práctica de tiro que se realizaba en el penal de Atlacholoaya, por la inexperiencia del instructor, perdió dicha extremidad, en medio de la orden de sus jefes policiacos de no hacer ni decir nada.
Extraoficialmente la víctima fue identificada como Roberto L.B, quien resultó herido de un balazo en un pie que le habría disparado por accidente su instructor u otro de sus compañeros con un arma de grueso calibre con la que realizaba práctica de tiro, el pasado 21 de abril.
Al ser herido el custodio fue trasladado a la clínica del IMSS de Plan de Ayala, en el municipio de Cuernavaca, donde debido a la lesión por arma de fuego le fue amputado el pie.
Esto dio como consecuencia que se conociera por versiones de otros custodios que todo es consecuencia de que la persona que imparte las prácticas de tiro a los custodios no es un instructor calificado sino la persona que se encarga de resguardar las armas en el penal de Atlacholoaya.
A pesar del lamentable hecho en el que el custodio perdió un pie y debería de haber ya una investigación para deslindar responsabilidades, ni la Comisión Estatal de Seguridad ni la Fiscalía General han informado nada al respecto.