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A 35 años de prisión y al pago por la reparación del daño moral fue sentenciado hoy Juan Carlos “N” por el juez de control, debido a que la Unidad de Delitos Sexuales de la Fiscalía General del Estado demostró su responsabilidad con base en pruebas irrefutables.
La justicia oral validó los peritajes que en materia de medicina y psicología presentó el Ministerio Público, con los cuales quedó demostrado el daño causado a la menor, aunado a la contundencia de la declaración realizada por la propia víctima durante el juicio.
De este modo se comprobó que durante el mes de octubre de 2012, en un domicilio ubicado en la colonia Alta Vista de Cuernavaca, Juan Carlos violó en repetidas ocasiones a su sobrina, que en ese entonces contaba con 11 años de edad.
El agresor habitaba en la planta baja con su familia; la víctima en el segundo piso junto a su madre, la cual salía a trabajar, y debido a ello la menor se quedaba sola algunas horas tras salir del colegio, tiempo que Juan Carlos aprovechó para ultrajarla.
El día que fue descubierto el abuso, Juan Carlos subió a la casa de la víctima; sin embargo, la mamá de la menor se encontraba en el lugar, al notar su presencia, él se puso nervioso y salió sin mediar palabra.
Ante la extraña visita, la señora cuestionó a la niña, de este modo conoció la conducta lasciva de su hermano en perjuicio de la menor.
Madre e hija se presentaron en la Fiscalía Regional Metropolitana a denunciar el hecho. Desde ese día Juan Carlos no volvió a su domicilio.
En el mes de marzo de este año, agentes de la Policía de Investigación Criminal (PIC) lograron dar con el paradero del agresor y ejecutaron en su contra una orden de aprehensión, de este modo comenzó el proceso penal que derivó en la sentencia de 35 años de prisión emitida hoy.
Juan Carlos purgará su sentencia en el Centro Estatal de Reinserción Social (Cereso) Morelos, del municipio de Xochitepec.
