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El gobernador de Morelos Graco Ramírez Garrido Abreu esta acotado políticamente luego de que se diera a conocer que el ex gobernador Jorge Carrillo Olea asesoró al próximo presidente de México Andrés Manuel López Obrador.
En 1998 Jorge Carrillo Olea renunció al cargo como gobernador de Morelos ante una ola de marchas y presión social que se financió por el entonces presidente de México Ernesto Zedillo quien se apoyó en el líder de las izquierdas Graco Ramírez Garrido Abreu.
Jorge Carrillo Olea en su libro “México en riesgo” en un capítulo describe “El caso Morelos: el uso envilecido del poder” donde denuncia que desde la presidencia de la República que dirigía Ernesto Zedillo solo porque le caía mal empezó una campaña en su contra apoyado por Luis Téllez en ese entonces jefe de la oficina de presidencia,
Liébano Sáenz secretario particular del ex presidente quienes filtraron al periódico estadounidense New York Times que Carrillo Olea tenía nexos con el narcotráfico y de ahí comenzó una campaña en su contra apoyada por Graco Ramírez.
El titular de la PGR Jorge Madrazo Cuellar inició una investigación en su contra pero tras varios años de lucha jurídica en 2003 Jorge Carrillo Olea fue exonerado de las acusaciones.
Jorge Carrillo Olea señaló que Graco Ramírez durante más de 30 años utilizó los movimientos de izquierda para ganar prebendas políticas y personales, tan es así, que Ernesto Zedillo se reunía con él porque había “arreglado” temas de movimientos de izquierda, pero también aprovechó para desestabilizar el estado de Morelos.
Graco Ramírez llegó de Tabasco fincó sus redes en Morelos hasta que obtuvo el cargo de gobernador para lo cual presionó para modificar la ley y que ciudadanos que no nacidos en Morelos pudieran aspirar a la gubernatura.
Hoy Graco Ramírez parece que tendrá una sopa de su propio chocolate porque alguien no nacido en Morelos como Cuauhtémoc Blanco ordenó ya una investigación en su contra, mientras que a nivel federal Andrés Manuel López Obrador quien ganó la presidencia también seguramente hará lo propio después de que Graco Ramírez lo atacó, lo denostó en actos públicos.
Ahora el panorama para Graco Ramírez se complica porque quien a hierro mata a hierro muere, pues al ser el principal desestabilizador de Morelos y orquestador de la salida de Carrillo Olea a quien acusó de proteger delincuentes, ahora parece que el tiempo le da una posibilidad a Carrillo Olea de limpiar su nombre y ajustar cuentas por ser cercano de Andrés Manuel López Obrador a quien le rechazó su oferta de trabajo por motivos de edad pero eso no significa que haga uso de información importante porque hay que recordar que él fue el fundador del Centro de Investigación y Seguridad Nacional (CISEN).
