Según un estudio presentado hoy hecho por la Universidad Nacional Autónoma de México en coordinación la Universidad del Valle de México se reveló que el 86% de la población recurre a la automedicación o por recomendación de familiares y amigos y esto pone en riesgo a la salud y la vida de los usuarios porque las bacterias se vuelven resistentes a los antibióticos.
Cada noviembre desde el año 2015 la OMS dedica una semana mundial para concientización de uso de antibióticos del 18 al 24 de noviembre. En México desde hace varios años se modificó el artículo 296 de la Ley de Salud para establecer que solo se pueden comercializar antibióticos con receta médica.
Los padecimientos que más se automedica la población son gripa, dolor de cabeza, malestar estomacal e infecciones. Los medicamentos sin receta alcanzan el 51% los analgésicos para el dolor, 28% antigripales y 11% antibióticos.
En el estudio la población dijo que se automedica porque el 27% no tiene tiempo de ir al médico, el 24% considera que su malestar no es grave, el 11% no tiene dinero, el 9% tiene conocimiento sobre el medicamento.
El 41% de los encuestados reconoció que tomó medicamento que vio en la televisión, pero las autoridades consideraron que no es lo mismo aliviar los síntomas que curar la enfermedad.
Los antibióticos son para combatir bacterias pero su uso indiscriminado es que la bacteria se hace más resistente a los medicamentos.
Al volverse más resistentes las bacterias se vuelve más costoso el tratamiento para un medicamento de más espectro.
Las recomendaciones son que hay que evitar la automedicación de los antibióticos para evitar resistencia de las bacterias porque eso es una amenaza para la salud mundial.
Usar antibióticos cuando un profesional de la salud lo recete, recordando que solo infecciones requieren antibióticos pues la gripe por ejemplo es un virus.
Cuando vaya al médico y use antibiótico tómese la receta completa aunque se sienta y no comparta antibióticos.