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Familiares y amigos del mexicano Édgar Tamayo Arias condenado a la pena capital en una cárcel de Texas marcharon por las principales calles de Cuernavaca buscando llamar la atención de las autoridades de Estados Unidos y que la Junta de Perdones determine frenar la ejecución.
Con pancartas y mantas donde se leía “el pueblo de Miacatlán te brinda su apoyo Édgar Tamayo” y también se solicita la eliminación de la pena de muerte salieron del calvario al zócalo de Cuernavaca, su familia con lagrimas en los ojos lo recordó cuando hace casi 20 años salió de su municipio en búsqueda del sueño americano el cual no logró conseguir.
Su familia dijo tener esperanza en que “Dios mueva el corazón” del gobernador de Texas, Rick Perry pues en sus manos está la vida de un mexicano al decidir si frena el proceso para que sea revisado el caso o bien la Junta de Perdones la cual ha sido impugnada porque se ha negado hasta el momento a reunirse y revisar los casos.
Lidia Cruz Arias prima hermana de Édgar pidió salvarlo y que regrese a su patria pero no en una caja de muerto, recordaron que era estudioso, buen muchacho y que decidió viajar a Estados Unidos para conseguir el sueño americano de ganar más dinero para poder ayudar a sus padres.
En Julio fue la última carta que recibieron sus primas donde los mandó saludar y les dijo que se encontraba bien por lo pronto.
Por su parte Taurino Castrejón refirió que hoy se realizaron marchas de apoyo en varias ciudades y envío de cartas al gobierno de Texas pidiendo que se respete la vida.
“Nosotros creemos que Édgar estuvo en el lugar y hora menos indicado, durante ocho meses no recibió atención del consulado, lo detienen con base a un retrato hablado, además se hace imposible que una persona que viaja atrás de un auto esposado con las manos atrás le haya disparado al policía que murió, crimen por el cual fue acusado Édgar Tamayo”
Dentro de lo que aseguran es que a Édgar no se le encontró rastros de pólvora en sus manos, no se encontró el arma que privó de la vida al policía Guy Gaddis. Desde el momento de los hechos no se le brindó asesoría a Édgar Tamayo.
