Después de que la autoridad reconoció que uno de los sujetos que asaltaba tiendas departamentales en Cuernavaca era un policía del estado y se dio de baja en 2011, el vocero de la Comisión Independiente de Derechos Humanos, José Martínez Cruz, cuestionó que las autoridades no están dando seguimiento a aquellos policías que han sido dados de baja para saber que donde están y que hacen.
El primer problema que se tiene es que se ha dado de baja a cientos de policías porque no pasan los exámenes de control y confianza, no precisamente porque están involucrados con la delincuencia en la mayoría de los casos es por asuntos de salud porque durante los últimos años subieron de peso o padecen diabetes o cualquier otra enfermedad.
Los dieron de baja pero aparte los ficharon para no ser contratados en ninguna corporación de seguridad del país sin que les dieran alguna otra opción como desempeñar cargos administrativos o crear una corporación desarmada para vigilar parques y jardines. Simplemente los despiden.
Y después de ello no tienen opciones para sobre vivir que algunos pueden irse a la economía informal otros, aprendieron un oficio pero otros más derivado de sus conocimientos sobre manejo de armas decidieron dedicarse a delinquir como fue el caso de este ex policía que lideraba la banda que asaltó el Oficce Max y otros negocios.
La Comisión Independiente pidió una investigación a fondo de si más policías están involucrados en la delincuencia y no se oculte el tema como pretendió hacerlo la Comisión Estatal de Seguridad.
“Que diga por qué razón salieron de la corporación, que digan por qué después de aplicar los exámenes de control y confianza salen de la corporación porque se dedican a delinquir, y aunque se trata de ex policías tenemos falta de certidumbre que tiene la sociedad porque entonces que quiere decir cuántos policías están siendo sacados de las corporaciones municipales, entonces que quiere decir fueron capacitados en manejo de armas y cuando salen ejercen esos conocimientos para fines particulares” dijo.