Gracias una denuncia anónima personal del Ayuntamiento de Cuernavaca, descubrió y clausuró un par de crematorios clandestinos que la empresa funeraria, “Hispano Mexicana”, operaba en la calle Minería número 107 de la colonia Lázaro Cárdenas mejor conocida como El Polvorín.
Inspectores municipales de la dirección de Gobernación a cargo de Gabriel Martínez, ubicaron estas instalaciones y al hacer una revisión descubrieron que se trata de dos crematorios, en donde personal de la funeraria aseguró que sólo se cremaban animales.
Al revisar todos los permisos que se supone debe de tener este tipo de instalaciones, los inspectores descubrieron que no cuenta con licencia de funcionamiento o de uso de suelo, entre otras, por lo que impusieron los sellos de clausura de manera inmediata.
Posteriormente el secretario del Ayuntamiento Capitalino, Enrique Paredes, confirmó que ante la gravedad del hecho se iniciaron denunciantes ante la Fiscalía General, la Delegación de la Procuraduría General de la República y la Delegación de la Procuraduría Federal del Medio Ambiente, además de que se participación a las autoridades de salud.
Indicó el abogado que serán estas instancias las encargadas de investigar si es verdad que sólo animales se cremaban en el lugar, o no, y de imponer las sanciones correspondientes de acuerdo a la gravedad de los delitos que se hayan cometido.