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Durante la temporada vacacional y para disminuir riesgos sanitarios por el uso de albercas, los Servicios de Salud de Morelos (SSM) incrementará la vigilancia sanitaria en balnearios, hoteles, centros vacacionales y desarrollos turísticos, ante el inicio de la temporada vacacional de verano.
Sergio Octavio García Álvarez, responsable de la Protección contra Riesgos Sanitarios del Estado de Morelos (COPRISEM), informó que esta supervisión denominada “Calidad sanitaria de agua de contacto de uso recreativo”, se realiza a todos los establecimientos con toma de muestras de agua para análisis bacteriológico y físico-químico.
El agua de las albercas debe cumplir con las disposiciones sanitarias establecidas, para garantizar que el uso de albercas y jacuzzis no es un riesgo para la salud de los usuarios, manifestó el funcionario.
Los balnearios y parques acuáticos son destinos turísticos por excelencia, por lo que en cada temporada vacacional la COPRISEM refuerza la vigilancia en los establecimientos para evitar infecciones de la piel, ojos, nariz, garganta y trastornos gastrointestinales por microorganismos patógenos que pueden encontrarse en el agua de las albercas, explicó el Comisionado.
El personal de la COPRISEM verifica la cloración del agua, condiciones físicas e higiene de albercas, reglamento de seguridad y protección a los usuarios, sistemas de filtración de partículas extrañas e higiene de baños y vestidores, por mencionar algunos de los puntos del acta de verificación.
García Álvarez dijo que esta temporada se pretende hacer 150 visitas de vigilancia sanitaria a igual número de establecimientos, y se tomarán alrededor de 300 muestras de agua para análisis.
Manifestó que el incumplimiento de las disposiciones sanitarias referidas, las empresas pueden ser sancionadas con amonestaciones, hasta suspensión temporal o total de actividades.
Por lo anterior, es de vital importancia que todos los establecimientos que prestan el servicio de alberca, cuenten con procedimientos de desinfección del agua, de operación, limpieza y mantenimiento, a fin de evitar riesgos a la salud de los usuarios.
En todos los hoteles, balnearios, parques acuáticos y desarrollos turísticos supervisados se proporciona orientación y educación de la normatividad sanitaria que les aplica; además de información a los usuarios para evitar la contaminación de albercas y participar en su conservación.
