Los desfiles cívico-militares en el centro de Cuernavaca desde hace dos años ahora son vigilados con decenas de elementos policiacos y ahora participan menos contingentes que en antaño, por ello, duran menos tiempo.
Este 20 de noviembre al celebrar el 105 aniversario de la Revolución Mexicana pudo observarse cientos de elementos policiacos que fueron desplegados por las cuadras donde pasaría el desfile incluyendo calles antes de los contingentes del desfile con la intención de evitar que alguien se manifestara contra el gobernador.
El año pasado estudiantes aprovecharon la fecha para marchar y exigir justicia por los 43 normalistas desaparecidos de Ayotzinapa y este año ante el temor de las autoridades de que fueran los maestros de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) (algunos detenidos la semana pasada por oponerse a la evaluación educativa) quienes aprovecharan el momento para manifestarse contra el gobernador decidieron hacer un cerco policiaco.
El operativo fue visible después de que concluyó el desfile pues cuando las personas de limpia comenzaron a barrer las calles fue justo el momento en que los elementos se agruparon para ser trasladados a sus cuarteles.
El propio comisionado estatal de seguridad Alberto Capella Ibarra como es su costumbre no quiso hablar a la prensa sobre el dispositivo de seguridad.
Desde hace tres años que llegó el actual gobierno los desfiles ahora son más cortos y bajo estrictas medidas de seguridad para evitar que alguien vaya a manifestarse. Pero mientras cientos de policías cuidan las manifestaciones la delincuencia sigue afectando a la ciudadanía.