Esta mañana elementos del mando único golpearon con la puerta de su patrulla un taxi en pleno centro de Cuernavaca luego de que uno de los elementos intentó bajarse por el lado contrario a la banqueta.
El problema fue que los elementos se pusieron prepotentes cuando vieron lo que habla ocurrido primero con el chofer del taxi, después con los elementos de tránsito y por último con los medios de comunicación quienes hacían su trabajo.
Al ver las cámaras de los medios de comunicación uno de los elementos intentó intimidarlos grabándolos con su celular, pero como no lo consiguió exigió que mostraran sus identificaciones ordenando a uno de sus compañeros registrar sus datos.
Los medios de comunicación después de identificarse le exigieron al policía prepotente que no dejaba de empuñar su arma se identificará a lo que finalmente accedió sacando su charola resultando adscrito a la Jefatura de la Unidad de Operaciones.
Al final a los elementos no les quedó más que reconocer que habían provocado un accidente y asumir las consecuencias pero la crítica social es qué clase de policía tenemos.