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A más de cinco meses de la desaparición del joven Fabián Tonatiuh Tlalapango Flores de 21 años de edad, hijo de la juez Efigenia Edith Flores Castillo, el pasado ocho de octubre, con todo y a que hay tres presuntos responsables vinculados a proceso, nada se sabe de su paradero, por lo que sus familiares señalan una cuestionable ineficiencia de la Unidad Especial de Combate al Secuestro, para esclarecer el hecho.
Los agraviados quienes demandaron no revelar sus nombres ante lo delicado del caso y por temor a represalias destacaron que no hay avances en las investigaciones, «como si hubiera una intención de no esclarecerlo» y señalaron como ejemplo de la indolencia oficial el hecho de que el pasado miércoles 8 de febrero, en la audiencia de cierre de investigación, en el desahogo de pruebas, la defensa de las tres presuntos involucrados, exhibió las deficiencias de la investigación que realiza la Unidad Especial de Combate al Secuestro.
Fue así como pusieron en evidencia, las abogadas defensoras a la Agente del Ministerio Público porque afirmaron “no ha hecho prácticamente nada” durante el cierre de la investigación, pero de última hora solicitó una ampliación del término pero sin tener un argumento bien sustentado.
Se recordó que los tres imputados y sujetos a proceso son: Víctor Manuel «N», Jonathan «N» y Jorge Alfredo «N», los dos últimos empleados del Tribunal Unitario de Justicia para Adolescentes -TUJA- y del Tribunal Superior de Justicia -TSJ- de Morelos, insistiendo los familiares de Tonatiuh, que tal parece que se le apuesta a que «el caso quede en el olvido», luego de que señalaron que el padre de Jonathan, uno de los tres detenidos, es un ex comandante antisecuestro de la otrora Procuraduría, y podría estar interviniendo para que no se culpe a su hijo, además de que Alfredo, se desempeñaba como oficial judicial y tendría amistad con jueces y magistrados del Tribunal Superior de Justicia (TSJ) del Estado.
Ante esta situación los familiares del joven Tonatiuh exigen a la Fiscalía General, a la Unidad Especial Antisecuestros que «hagan bien su trabajo, para que este caso no sea uno más que quede en la impunidad y en el olvido».
LOS ANTECEDENTES.
Recordaron los familiares de Tonatiuht que este salió de su domicilio, localizado en la calle Jacaranda de la colonia Antonio Barona de Cuernavaca, el día 7 de octubre del año pasado, alrededor de las 19.00 horas y se habría dirigido al mercado del lugar, para tomar un taxi con destino a Plaza Galerías.
De acuerdo a la información proporcionada por los enterados del caso, el joven estudiante de Ingeniería, cada fin de semana salía a divertirse con unos amigos que había conocido en el gimnasio que frecuentaba y ese día se disponía a hacerlo ya que se presuma acudirían a la inauguración de un bar en la colonia Polanco de la Ciudad de México, pero después se supo que nunca llegaron a este antro.
De acuerdo a los datos que lograron conocer los familiares del joven desaparecido, este junto con algunos de sus amigos identificados con los sobrenombres de “El Coco”, “La Negra”, “El Jona” y otros, entre estos varias mujeres, habrían acordado no acudir al antro a Polanco y mejor asistir a un baile, en un bar localizado en San Juan Teotihuacán, Estado de México.
Por algunas de las investigaciones realizadas se sabe que a las 23:00 horas de ese día, Tonatiuh grabó, con su teléfono celular algunas imágenes acompañado de algunos de sus amigos e incluso compartió un video en sus redes sociales.
Por igual se sabe que la última llamada que el joven hizo, fue a su novia, aproximadamente a las doce horas y otra más alrededor de las cuatro de la mañana del día siguiente y ya no se supo más de él, pues ya no contesto su teléfono.
Trascendería que el grupo de amigos con los que estaba Tonatiuh habría estado en dicho antro hasta las dos de la mañana y que después habrían decidido seguir la fiesta en la casa de uno de ellos localizada en el poblado de s anta María Ahuacatitlán en Cuernavaca, pero no se sabe más.
Hoy se sabe que cinco días después de la desaparición de Tonatiuht, sus familiares presentaron la denuncia y tras las indagatorias realizadas, dos meses después el día ocho de diciembre del año pasado, la Fiscalía General, formuló imputación por esta desaparición, contra: Víctor Manuel «N», Jonathan «N» y Jorge Alfredo «N», pero de nada ha servido, pues el hijo de la juez no ha sido encontrado.
