Ya fueron identificados los dos individuos linchados en el palacio municipal de Huitzilac por pobladores, la tarde del miércoles.
Las víctimas se llamaban Enrique Manuel de 21 años y José Luis «N» de 35 años, ambos vecinos de Jiutepec.
Mediante un comunicado, la Comisión Estatal de Seguridad (CES) informó que a las 13:33 horas se recibió un reporte a través del número de emergencias 911 donde se indicaba que sobre la calle Matamoros de la colonia Barrio la Purísima, como referencia cerca de las canchas, dos masculinos habrían intentado privar de la libertad a una menor de edad, en tanto, familiares y vecinos retuvieron a los presuntos y los golpearon.
Al llegar el personal de la Policía Morelos, tuvo contacto con la parte afectada y realizó la detención de uno de los hombres, sin embargo un grupo de aproximadamente 20 personas agredió a los uniformados, evitando el traslado del segundo de los mencionados, logrando bajarlo de la unidad; los elementos, mediante controles cooperativos intentaron establecer un diálogo haciendo los pobladores caso omiso, únicamente manifestaron que llevarían por sus propios medios al palacio municipal a los presuntos responsables.
Asimismo, los elementos del Mando Coordinado pidieron apoyo de más policías así como de una unidad de rescate médico a fin de reducir la tensión mediante comunicación y negociación; cabe señalar que al arribar el equipo de soporte, encontró resistencia activa de un aproximado de 200 personas, mismas que se negaron rotundamente a entablar diálogo con la autoridad y expresando que debían retirarse para evitar ser agredidos.
En el lugar, los dos presuntos implicados fueron golpeados por los habitantes provocándoles heridas visibles, en ese momento los elementos policiales lograron introducirlos a los separos que están ubicados en las instalaciones del palacio municipal. No obstante, derivado de la superioridad numérica de los pobladores, éstos lograron introducirse, romper candados y cadenas, sustraer a los dos detenidos y sacarlos a la explanada, fue en ese momento que la turba continuó a base de golpes para posteriormente impregnarlos de gasolina y prenderles fuego.