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Resultó ser un cocodrilo hembra, el animal que elementos de la Procuraduría de Protección al Ambiente capturaron este martes en un canal de riego en la colonia Jacarandas de Yautepec. Se comprobó que habitaba de manera clandestina en una casa, la cual no ha sido identificada, así como a quienes la mantenían como mascota.
“Es una situación fuera de serie en Morelos sin embargo pues vamos a investigar y llegar a las últimas consecuencias”, mencionó José Iván Fernández Galván, delgado de la PROFEPA.
La cocodrila de un metro 40 centímetros de largo será llevada a la unidad de manejo de vida silvestre de Texcoco, para que ahí sea alimentada de manera adecuada, al resultar un reptil juvenil obeso.
Autoridades de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente, hicieron un llamado a la ciudadanía, para evitar tener en cautiverio a este tipo de especies, por el riesgo que puede representar.
“Aquí agradecer mucho a la población que tengan mucho cuidado y vamos a someter esto a investigación, vamos a ver si tiene un registro porque los animales que están regulares cuentan con un chip (…) lo preocupante es que tengamos mucho cuidado que los vecinos reporten cuando sepan cuando hay un animal de este tipo que puede poner en riesgo a la población”, explicó el delegado.
Es que la cocodrila no es la única especie decomisada, la PROFEPA está a punto de liberar a la vida silvestre a una boa y llevar a un centro ambiental a un monstruo de gila, que es sumamente peligroso.
Para quienes pretendan tener una de estas especies en casa, las sanciones van de los dos millones de pesos hasta la cárcel.
