Zona Centro Noticias El poder de la información
Derivado de la implementación del programa «Conduce sin Alcohol» en Cuernavaca implementado por esta administración a través de la Secretaría de Protección y Auxilio Ciudadano (SEPRAC), el Cabildo aprobó reformar el Reglamento de Tránsito y Vialidad del Municipio con relación a los niveles de alcohol que se establecen para verificar si algún conductor se encuentra en condiciones inapropiadas por el consumo de bebidas alcohólicas, y en consecuencia ser acreedor a una infracción administrativa, con lo cual se ratifica que las actuaciones de la policía municipal se encuentran debidamente fundadas en la normativa municipal.
En la presentación del proyecto, la regidora presidenta de la Comisión de Gobernación y Reglamentos, Paz Hernández Pardo, explicó que la reforma resuelve errores de redacción en el artículo 68 de dicho reglamento que establece el procedimiento sancionatorio para los conductores de automóviles y motocicletas, quedando de la siguiente manera: «Si tiene una cantidad de alcohol en la sangre superior a 0.8 grados por litro o de alcohol en aire expirado menor a 0.39 grados por litro o bajo el influjo de narcóticos, aun cuando se le haya suministrado por prescripción médica», es motivo de infracción pero sin detención del vehículo o el conductor.
Cuando el aparato para medir los niveles de alcoholemia, detecta que el alcohol en aire expirado es mayor al .40 grados de alcohol en la sangre, se pone a disposición de juez cívico al conductor y el automóvil es asegurado para ser trasladado al depósito vehicular o coloquialmente conocido como corralón.
Al respecto, el presidente municipal de Cuernavaca, José Luis Urióstegui Salgado, reiteró que el programa “Conduce sin alcohol” no tiene fines recaudatorios, al contrario, tiene como objeto evitar accidentes, pérdida de vidas humanas y que se afecte, tanto la integridad como el patrimonio de las personas que se involucran en accidentes, poniendo en riesgo su estabilidad patrimonial por conducir de manera intoxicada.
