La Procuraduría General de Justicia investiga si el asalto y robo que sufrió la noche de este jueves a las 21.00 horas aproximadamente, en la calle de La Luz de la colonia Chapultepec, el foto-periodista de la revista Proceso, Margarito Pérez Retana, es un robo o si se trata de un ataque directo por la labor informativa que desempeña el agraviado.
Ante este hecho integrantes del Mecanismo de Protección a Periodistas acordaron con la PGJ, garantizar la seguridad del foto periodista Margarito Pérez, corresponsal de la agencia Apro, luego de que la noche del jueves sujetos desconocidos lo amagaron y le robaron su equipo fotográfico de trabajo.
Tras la denuncia que interpuso el afectado, fue a las nueve de la noche de ayer jueves cuando circulaba por la calle de la Luz, a bordo de su motocicleta, cuando dos sujetos que viajaban en un auto compacto Jetta, de color gris, presuntamente escoltados por otra camioneta, se le cerraron y lo obligaron a descender de su moto.
El fotógrafo descendió de su vehículo ligero y escapó del lugar corriendo, refugiándose en un domicilio vecino, regresando posteriormente tras ser auxiliado por un policía preventivo estatal que se encontraba franco, pero que lo ayudo, y tras solicitar el auxilio de la policía municipal de Cuernavaca, regresó al lugar donde había sido interceptado por los desconocidos, encontrando tirada su motocicleta que no pudieron poner en marcha los delincuentes, pero si se llevaron su mochila con su cámara y otros implementos de trabajo.
Posteriormente alrededor de la medias noche el agraviado acudió a la agencia del Ministerio Público, a presentar su denuncia, por lo que la subprocuradora de Justicia, Adriana Pineda Fernández, al tener conocimiento de estos hechos ordeno iniciar las investigaciones para esclarecer los hechos.
Pero mientras tanto, por la posibilidad de que se trate de un acto de agresión o intimidación hacia el reconocido foto periodista, se reunieron los integrantes del Mecanismo de Protección a Periodistas, integrado por la Procuraduría General de Justicia, la Secretaría de Seguridad Pública, un enlace de la Comisión de Derechos Humanos del Estado de Morelos, y reporteros, quienes determinaron de manera inmediata adoptar las medidas cautelares para proteger la integridad del corresponsal de la revista Proceso.
En este contexto se destacó, que en la denuncia que inició Pérez Retana dejó asentado que llamó varias veces a la línea de emergencia el 066, pero nadie le contestó, no recibió el apoyo que tanto se publicita que hay por parte de las autoridades en estos casos.